miércoles, 29 de septiembre de 2010

Sobre el día que fui al Parque de Atracciones de Madrid mientras viajaba a Ecuador sin siquiera coger un avión. Teletransporte creo que se llama. 1.

       Era domingo, el día del Señor, que también rima con Ecuador.
       Die me había prometido tiempo atrás que me llevaría al Parque de Atracciones porque la Warner ya nos la conocíamos , y qué mejor día que un domingo de septiembre con sol, cuando la gente se da cuenta de que el verano finaliza sin piedad y por supuesto tienen que aprovecharlo.
       Ya nos dimos cuenta de que muy vacío no estaba cuando la entrada a la Casa de Campo tenía unos metritos de atasco (medio km más o menos a uno por hora, pues eso, haciendo cuentas media hora en un callejón sin salida). "Serán las familias felices y los novios acaramelados que están remando en las barquitas esas que salen en la tele", pensamos Die y yo.

      Vale, pues aparte de todo eso, cuando llegamos a la cola del Parque nos dimos cuenta de que era la fiesta de Ecuador. También nos dimos cuenta de que había seis o siete colas además de la más larga y la única visible así a la primera. Cambiamos con éxito mientras la gente nos seguía como si fuéramos pastores o algo así.

      Una vez conseguimos entrar nos hicieron una foto muy bonita en la que yo salía monísima y Die un poco mal, y otra romanticona en la que Die salía monísimo pero yo salía fatal, así que no nos llevamos ninguna. Aparte es que costaban diez euros, pero eso no tuvo nada que ver, claro.

      Empecé a emocionarme viendo todas las montañas rusas llamándome, mientras no podía hacer más que apartarme para no salir en fotos familiares con banderas ecuatorianas de fondo. Die y yo empezamos a hacer proporciones: él decía que 50-50 (ecuatorianos-españoles) y yo me aventuraba a decir 60-40.
  
       Nos propusimos montarnos en la primera montaña rusa del día, unas arañas muy monas que giraban mucho y muy deprisa. La cola era pequeñita así que nos metimos en la caseta en la que justo detrás se veía la montaña rusa en cuestión. Veinte minutos después y unos suspiros de desesperación de Die por mis grititos y saltitos histéricos, nos montamos en el vagón. Era un vagón como el del tren de la bruja pero con pistolitas, que según Die nos llevaría al sitio de empiece de la montaña rusa, que lo estaban dando emoción, vamos. El vagón nos metió en un túnel en el que teníamos que matar arañas (una buena introducción teniendo en cuenta que íbamos a una montaña rusa cuyos asientos eran arañas y que se llamaba Aracnofobia o algo así). Cincuenta arañas muertas después, volvimos a donde empezamos. Y a todo el vagón nos dio la risa. Tan tan tolis que nos metimos donde no teníamos que meternos.
     La que buscábamos estaba justo detrás. Después lo pudimos comprobar. Mareos y tal pero una buena sensación.

       Para recuperar un poco el sentido y no caernos de bruces nos fuimos a dar una vuelta por la zona tranqui y así decidir en qué montábamos después. La proporción ecuatorianos-españoles comenzó a variar: 70-30 de manera clara, ahí no hubo ningún tipo de discusión.

       La siguiente atracción fue la lanzadera, donde terminé con un grito orgásmico (un OHH DIOOOOS memorable) que salió de mi garganta por no haber podido gritar durante la bajada, se te suben los ovarios a la garganta y es lo que tiene. Además subiendo me acordé de que tenía vértigo y a Die le dio tal ataque de risa que no pudo coger aire para caer con algo de dignidad.

      Las colas crecían. Todos los ecuatorianos se conocían. Y yo cambié mi manera de pensar acerca de ellos, mal que me pese. En todas y cada una de las colas se me colaron al menos una o dos personas. Por no decir diecisiete o veinticinco. Así que mientras Die se ponía en modo armario y nadie pasaba por dónde estaba él, a mí me empujaban sin siquiera pedir permiso y mucho menos perdón. Al final conseguí sacar carácter mientras las excusas de la gente me maravillaban cada vez más y más.

Niño pequeño se intenta colar.

Yo: Niño, a dónde vas?
Niño: Es que está mi hermana mayor ahí esperándome.
Yo: Pero estás solo o está tu madre por ahí atrás?
Niño:Estoy con mi hermana que me está esperando ahí arriba.
Yo:Vale pasa.
Die: Verás como ahora viene la madre detrás de él con toda la familia.
Yo: Joe no seas malpensado, el niño estaba sólo y era pequeño, le dejo pasar y punto.

Pasan diez segundos. Alguien me empuja mientras Die sigue en su modo armario y me mira con ojitos de superioridad y pone esa sonrisita que odio. Me doy la vuelta, una madre con otra niña intenta pasar.

Madre: Miiiira ooooye es que ha pasado mi niño hace un momentito por aquí.
Yo: sí señora, pero ha ido con su hija, llevo una hora y media haciendo cola y no la voy a dejar pasar.
Madre: es que estábamos en el baño pero también hemos estado haciendo cola.
Yo: Y por dónde ha salido?? porque es imposible salir de esta cola del diablo!
Madre en bajito: Verás es que mi niña tiene un problema de corazón y le faltaba el aire y nos hemos ido al baño hasta que se ha mejoradooo....
Yo: Vamos, lo que me faltaba, pues una de dos, o es usted una mentirosa o es una irresponsable, porque hace falta ser irresponsable para dejar montar a su hija en una montaña rusa si tiene problemas de corazón.
Madre digna y completamente metida en un culebrón: O sea que no me vas a dejar pasar no?
Yo: Pues no oiga, fíjese que no me da la gana.
Die: Si es que no sé para qué hablas, con lo fácil que es ni mirar, a mí ni me empujan, lo ves??

Cada tonto con su tema....

Y así fue como empezó mi ira hacia esta gente concentrada en el Parque aquél maravilloso día. Tanto hacia unos por colarse como hacia otros por dejarse pisar.
Continuará...

4 cosas a objetar:

.undermind dijo...

Hombre creo que es un riesgo generalizar así eh? Yo personalmente me he colado en muchísimas colas. Ahora ya me da vergüenza, pero de pequeño... buff.

Saludos.

Burbu dijo...

De verdad que lo último que quise en ese día fue generalizar, pero juro y perjuro que no me quedó más remedio, no vi ni a uno sólo que no fuera empujando, mirando mal, escuchando música con el altavoz del móvil o colándose....y me jode pensar así eh? de hecho siempre estoy de broncas con Die porque él es súper radical en estas cosas y no lo entiendo pero esta vez...flipé, de verdad!

.undermind dijo...

Te he dejado un regalo en mi blog, pasa a recogerlo o tendrás 7 años sin sexo.

Saludos

Burbu dijo...

Ya!! que prisa me he dado madre, un minuto más e implicaría unos días sin sexo!!! ¿cómo se te ocurre poner esa condición? Buuuuuh!!

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