Hoy iba a hablar de que mi hermano mayor ha cumplido veinticinco añitos y el muy petardo ha decidido independizarse. Y ahora se dedica a comer ensaimadas y a ir a fiestas de reggea (o como se escriba). Pero Pétalo me ha robado la idea de lo de cumplir un cuarto de siglo (jum!).
Así que voy a hablar de algo que interesa a todas las féminas mundiales mayores de 13 años (supongo) y también debería interesar a los hombres con ganas de cualquier relación para/con nosotras. Algo que está presente en nuestras vidas, por lo menos la mitad de ellas. Una cosa que afecta tanto tanto TANTO que es capaz de cambiar nuestro humor. Posee la capacidad de hacer parecer que tenemos un síndrome bipolar claro y que no da lugar a las treguas. Esta terrible cosa, señores y señoras, es:
EL SPM
Así, en rojo y todo.
Aquí una servidora lleva con nuestro amado síndrome premenstrual (prerreglish syndrom dicen los expertos) algo así como un mes y medio.
No lo soporto más. ¡No puedo con mi vida! (cuán trágico suena, eh?).
El lunes pasado, y
tras unas cuantas batallas libradas con el destino, al fin fui a ver al ginecólogo. El caso es que cuando le llamé, acababa de venir de la playita, tras unas vacaciones amorosas llenas de
sexo, lujuria y perversión... amor, como la propia palabra indica, claro (laaa, lalalaaaa...), y tenía un ligero retraso en mi periodo (regla para los más coloquiales), pero nada fuera de lo normal. Digo nada fuera de lo normal porque mi querida y amada amiga mensual, no es tan mensual como parece, sino que va y viene cuando, como y donde le sale de los mismísimos ovarios (qué bien traído, coñe).
Me dieron cita para un mes después, y cuando llegó El Día, con mayúscula porque fue el primer día que mi agujero para tronquito del amor fue visto por una persona que sabe de esas cosas, mi regla seguía sin haber venido. Baby no había porque no quiero haceros tíos ni nada de eso, y porque me había hecho un test de embarazo y había dado negativo, y porque el señor ginecólogo me lo dijo después de hacerme cosas desagradables en sitios a veces muy agradables, pero no fue esa una situación muy parecida a estar con Die, por decirlo de alguna manera.
El caso, que me lio, es que tengo los ovarios poliquísticos (que parece ser que no es lo mismo que tener quistes en los ovarios) y mis óvulos a veces no salen de mis cojones femeninos como deberían. Esto, traducido a la vida real, quiere decir que: voy a hacer como Aristóteles
1. El SPM aparece cuando tu cuerpo cree que vas a tener la regla.
2. Lo que se dice ovular, has ovulado, pero el óvulo se ha quedado encerrado en casa y el cerrajero no llega (después de mes y medio, menudo vago), así que la regla no aparece.
3. Las hormonas dicen que has ovulado, así que tu cuerpo cree que la regla va a aparecer.
Si 2 entonces 3, y si 3, entonces 1 (silogismo puro y duro, toma ya!).
Vamos, que llevo un mes y medio con SPM. Y juro y perjuro, con la mano derecha en mi teta izquierda, que como mi querido Endometrio (Endo para los amigos) no decida liberar cosas asquerosas a la de YA, yo puedo morir, o me pueden matar por insoportabilidad múltiple y aguda.
Paso de la alegría al mal humor en cosa de microsegundos, del mal humor al llanto en menos aún, y me da por llorar y reír a la vez (verídico, estuve así media hora el otro día, y hoy me ha vuelto a dar en la biblioteca aunque he sido capaz de controlarme). Ayer me pillé un cabreo monumental porque llegué a ver una peli de amor con Die y no tenía palomitas con el antojo que tenía.
Eso por no hablar de los granos que me invaden y los pelos que salen a la velocidad de la luz, por lo menos. Y los granos que me salen porque los pelos intentan crecer tan rápido que la piel no resiste tan cruel ataque físico. ¡Además retengo líquidos, y estoy hinchada como una maldita foca!
Hoy me ha dado por cantar ópera a voz en grito mientras gritaba: ¡¡¡¡Mamáaaaa!!!!¡¡¡¡OOOOh Mamáaaa!!!! Tengo a mis padres desquiciados, a Die desquiciado, a Coster desquiciado, y a la rana nueva del estanque también (estoy atenta a que tome el sol para ir a asustarla, jeee,jejeje). Y me quiero comprar un conejo, aunque no quiero comprarme la jaula porque es mucho más cara que el conejito precioso y blanquito y pequeñito que me vuelve loca.
Mientras, el viernes tengo examen de física (seh, 5ª convocatoria -.-''). Iba a decir que podíais imaginaros mi estado, pero creo que os lo he descrito a la perfección.
¡¡¡J##KHAsjhw##&%?ñ**kk!!!!
PD/ ¿Alguien sabe decirme con palabras normales qué es exactamente tener líquido libre en el saco de Douglas? Adorado Gugel no sabe decírmelo bien, jopetas =(.
PD2/ He pensado en relacionar mis altibajos con el gen de locura transitoria que azota a mi familia paterna sin ningún tipo de piedad, pero he decidido desechar la idea, pues es algo que me acojona. Quizá debería hacérmelo mirar.